Influencia de la voz interna en el estado de ánimo
“A veces, el mayor enemigo eres tú mismo. Supera tus pensamientos negativos y comienza a creer en ti mismo”. -Helen Edwards
¿Alguna vez han oido hablar sobre el invitado no deseado? Esa voz interna que todos tenemos y que muchas veces lo que nos cuenta va a tener gran influencia en nosotros mismos, en nuestro día a día, sobre todo en nuestro estado de ánimo.
La voz interna es aquel invitado no deseado, esa persona incómoda, que hace comentarios acerca de ti. Esos comentarios muchas veces pueden ser incómodos o desagradables y tienen una reacción en nosotros mismos y provocan diferentes emociones, dependiendo la situación.
Pongamos un ejemplo: Es la cena navideña, toda la familia reunida y una persona ahí presente empieza a hacerte comentarios como: “¿has subido de peso no?, te ves agotado con las ojeras que traes, ¿estas muy aburrido o por que no hablas?, entre otros más. Uno se siente molesto, se puede llegar a enojar o sentir triste por estos comentarios que son de personas externas hacia uno. Ahora si lo pones internamente, que estos comentarios los hiciera esta voz interna, ¿Cómo te sentirías contigo mismo? ¿cambiaria tu estado de ánimo?
Esta voz interna, va a tener una gran influencia en lo que sentimos y día a día se va apoderando de nosotros con pensamientos negativos. Hay evidencia científica que respalda esta relación entre los pensamientos y el estado de ánimo. Por ejemplo, un estudio publicado en el “Journal of Personality and Social Psychology” encontró que las personas que se enfocaban en pensamientos negativos tenían una mayor probabilidad de experimentar síntomas de depresión. Otro estudio publicado en la revista “Behavior Therapy» encontró que la terapia cognitiva, que se centra en cambiar los patrones de pensamiento negativos, era efectiva en el tratamiento de la depresión.
Un ejercicio para detectar a esta voz interna en la terapia cognitiva es el siguiente:
Cierra los ojos un minuto y medio y activa esa voz interna. En ese tiempo tienes que decirte todas aquellas cosas desagradables. Concéntrate solamente en ellas, sin
integrar cosas agradables o sentimientos de alegría, paz, comodidad. Esos los dejamos de lado. Al terminarse el tiempo, abrir los ojos y reflexionar lo siguiente: ¿me siento más
animado que antes? ¿cómo está mi estado de ánimo?
Reflexionando, podemos darnos cuenta el impacto que tiene solamente 1 minuto y medio el decirnos esto y el efecto que tuvo en nuestro estado de ánimo. Ahora imaginémonos el impacto que tiene el decirnos esto durante un día, o todos los días, como influye en nuestra percepción de nosotros mismos, en lo que sentimos, como vamos cambiando durante el día por esta voz interna.
Podemos controlar esta voz interna quitando fuerza en nosotros mismos. Démosle un nombre a esta voz y cada vez que esta voz o invitado no deseado quiera aparecer en
nosotros para cambiar nuestro estado de animo, saber que ahí esta, que no se va a ir, pero que podemos hacer la paz y decir este comentario no es mío, es de mi voz interna, dejar que no cobre tanta importancia, soltarlo y de esta manera no dejar que controlen nuestro día a día y por lo tanto nuestro estado de ánimo.
Bibliografía:
Beck, A. T. (1979). Cognitive therapy of depression: New perspectives. In the treatment of depression: Current issues and research directions (pp. 265-290). Wiley.
Nolen-Hoeksema, S., Parker, L. E., & Larson, J. (1994). Ruminative coping with depressed mood following loss. Journal of personality and social psychology, 67(1), 92-104.
Karla Orozco González