Probablemente nunca te hayas parado a pensar en la diferencia entre estos dos términos, y eso es normal, porque en muchas ocasiones se usan de forma indistinta. No obstante, esto es erróneo, ya que hablar de trabajo multidisciplinar no es lo mismo que hablar de trabajo interdisciplinar. Es precisamente esto lo que motiva la redacción de este artículo con el deseo de que te sea útil: aclarar las diferencias y similitudes entre estos dos términos para así poder usarlos con propiedad y saber qué es lo que ofrecen los servicios inter y multidisciplinares.

Empecemos por la etimología de las palabras. Ambos términos tienen en común la raíz “disciplina” y el sufijo “-r”, que juntos hacen referencia a la existencia de diferentes disciplinas. En el ámbito de la salud, que es aquel en el que nos encontramos, esto puede abarcar muchísimas disciplinas distintas, como pueden ser la Medicina (con todas sus especialidades), la Psicología, la Nutrición y la Fisioterapia, entre otras. Si te vuelves a fijar en los términos, te darás cuenta de que lo que los diferencia son sus prefijos: multi- e inter-. El primero, multi-, hace referencia a multiplicidad o muchos. Esto quiere decir que se refiere a la existencia de muchos servicios distintos en un mismo espacio. El segundo, inter-, tiene su origen en el latín, y significa dentro de, entre o en medio de otra cosa. En este caso, el significado que más se ajusta es “entre”, ya que “interdisciplinar” se refiere al trabajo que existe entre las disciplinas que conviven en un mismo espacio.

En resumidas cuentas, interdisciplinar es ir un paso más allá de multidisciplinar, ya que no sólo nos habla de la existencia de multiplicidad de disciplinas en un mismo espacio, sino que nos habla de una interacción entre esas disciplinas de forma coordinada. Pero entonces… ¿cómo funciona el trabajo interdisciplinar?

Antes de empezar con el ejemplo, es importante dejar claro que en el modelo interdisciplinar se parte de la premisa de que el todo es más que la suma de las partes. Esto quiere decir que, si tenemos un problema y lo dividimos en partes para trabajarlas por separado, no nos permitirá solucionar ese problema inicial, ya que es más complejo que el abordaje de esas partes por separado. Por eso mismo es necesario que el trabajo con esas partes esté coordinado por todas las personas que intervienen en él para ver el problema en su totalidad y así seguir una dirección que sea compartida por todos.  A continuación, te dejamos un ejemplo para ilustrar el funcionamiento de esta forma de trabajar:

Imagínate que una persona acude a consulta psicológica por un problema con la comida. El psicólogo intentará entender el origen de este problema para poder trabajar sobre él junto con la persona y así perseguir juntos el objetivo de lograr un mayor bienestar. Además, el psicólogo, que conoce cómo funcionan los problemas de la conducta alimentaria, sabe que en estos casos existe un desajuste en la forma de alimentarse. Por lo tanto, decide acudir al conocimiento en el área de su compañero el nutricionista y le deriva a esta persona para que él pueda ayudarla con sus hábitos de alimentación. Por lo tanto, el psicólogo y el nutricionista trabajan juntos con esta persona y se coordinan entre ellos para poder acompañarla hacia su bienestar entendiendo que su problemática es más amplia de lo que pueden trabajar la Nutrición y la Psicología por separado. De esta manera unen fuerzas y comparten su visión de un mismo caso para trabajar conjuntamente.

Lo mismo ocurre muchas veces con las personas que acuden al servicio de fisioterapia con dolores de espalda y los fisioterapeutas descubren que el origen de ese dolor no es físico sino emocional, y deciden derivar a esa persona al servicio de psicoterapia para trabajar conjuntamente el dolor físico y el emocional.

Esperamos que este artículo haya aclarado tus dudas y te haya ayudado a comprender la diferencia entre un abordaje multidisciplinar y un abordaje interdisciplinar.

Te dejamos algunas preguntas para la reflexión y te invitamos a que compartas tu punto de vista con nosotros:

Y tú… ¿conocías ya estas dos formas de trabajar?

¿Alguna vez has sentido que un problema que tenías se podía tratar desde diferentes perspectivas?

¿Has recibido algún tratamiento concreto pero has sentido que faltaba algo más por trabajar?

¿Qué opinas del trabajo interdisciplinar?

¡Te leemos!

Elena Rodríguez Ventosa