Comunicar a tu entorno que eres una Persona Altamente Sensible (PAS) puede ser un paso importante para fomentar una comprensión mutua y construir relaciones más sólidas.
Te brindamos algunas sugerencias sobre cómo abordar este tema con las personas más cercanas y cómo pueden apoyarte:
¿Cómo decir que soy una persona PAS?
1. Educación sobre la PAS: Antes de hablar con tu entorno, asegúrate de entender bien qué significa ser una PAS y cómo te afecta. Puedes compartir información relevante sobre la alta sensibilidad, como la tendencia a sentir emociones de manera intensa, ser fácilmente abrumado por estímulos sensoriales y tener una gran empatía hacia los demás.
Ej: «Recientemente descubrí que soy una Persona Altamente Sensible (PAS). Básicamente, significa que percibo y proceso las emociones y los estímulos sensoriales de manera más intensa que la mayoría de las personas.»
2. Comunicación abierta y honesta: Elige un momento adecuado y un lugar tranquilo para hablar con las personas cercanas. Explica cómo descubriste que eres una PAS y qué impacto tiene en tu vida diaria. Sé honesto sobre tus desafíos y necesidades, pero también destaca tus fortalezas como la capacidad para percibir sutilezas y tu profunda conexión emocional con los demás.
Ej: «Quería hablar contigo sobre algo importante para mí. He descubierto que soy una PAS, y eso explica por qué a veces me siento abrumado por ciertas situaciones o estímulos.»
3. Específica tus necesidades: Una vez que hayas compartido tu experiencia como PAS, explora cómo tus seres queridos pueden ayudarte. Por ejemplo, puedes pedirles que sean conscientes de los entornos ruidosos o de alta estimulación que pueden causarte ansiedad, o que te den tiempo y espacio para procesar tus emociones cuando te sientas abrumado.
Ej: «Me ayudaría mucho si pudiéramos evitar los lugares muy ruidosos o con demasiada gente cuando salgamos juntos. Me resulta difícil concentrarme y disfrutar cuando hay demasiado alboroto.»
«Cuando esté sintiéndome emocionalmente abrumado, agradecería que me dieras un poco de espacio para procesar mis sentimientos antes de hablar al respecto.»
4. Fomenta la empatía y la comprensión mutua: Anima a tus seres queridos a hacer preguntas y expresar sus propias preocupaciones o dudas sobre la alta sensibilidad. Escucha activamente sus perspectivas y trabaja juntos para encontrar formas de apoyarse mutuamente en el día a día.
Ej: «Entiendo que puede ser confuso o nuevo para ti escuchar sobre la alta sensibilidad. ¿Hay algo en particular que te gustaría saber o entender mejor?»
«Es importante para mí que podamos apoyarnos mutuamente. ¿Hay algo que te gustaría que hiciéramos juntos para mejorar nuestra comprensión y apoyo mutuo?»
5. Proporciona recursos: Si es necesario, recomienda libros, artículos o recursos en línea sobre la alta sensibilidad para que tus seres queridos puedan aprender más sobre este rasgo de personalidad y cómo pueden ser aliados en tu bienestar emocional.
Ej: «Hay un libro llamado ‘El don de la alta sensibilidad’ que explica muy bien este rasgo de personalidad. Creo que podría ser útil para entender mejor lo que estoy experimentando.»
Recuerda que cada persona es única
Por supuesto, es importante recordar que cada persona es única y puede tener necesidades y experiencias diferentes. Por lo tanto, estos ejemplos son solo un punto de partida y es fundamental adaptar la comunicación según las necesidades y preferencias individuales de cada persona.
Recuerda que cada persona puede tener una reacción diferente ante esta revelación, pero lo importante es establecer una comunicación abierta y honesta para construir una relación más comprensiva y solidaria.
Cielo Tebar